Me da mucha risa cuando alguien trata de molestarme y se le ocurre la brillante idea de decirme cosas como “pelado”, “se te descoció el gorro”, “sobrado eres… te pasas de frente”, “esas ya no son entradas, son salidas”, “ven que me olvidé echarme desodorante”, “frente de rodilla”, “veo lo que piensas”, “te veo hasta el asterisco”, y muchas cosas así. Y me da mucha risa porque obviamente es gracioso, pero también porque esperan que me pique y no lo hago (Bueno con la última si me piqué un poquito jajaja).
Y a pesar que soy recontra picón, si me dicen cosas así, no me pico, por la simple razón de que es cierto… soy pelado. ¿Y qué? Es verdad, no se puede hacer nada al respecto, la mera neta carnal, la true… ¿entonces por qué tendría que picarme o peor aún molestarme si lo que dicen es verdad?
¿Acaso cuando me dicen que mido 1.70m me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que no tengo cintura me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo dientes de cuy me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo cáncer me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo una pierna me molesto? No, porque es verdad.
La verdad es única, es como es, es inmutable; por tanto la verdad no duele… lo que duele es cuando nosotros no queremos aceptar la verdad como es, muchas veces por razones absurdas. Yo no puedo cambiar los hechos hasta la fecha porque el pasado es historia y ya fue… lo que puedo hacer es aceptarlas como pasaron… en palabras de la sabia popular Tilsa… “¡Apechuga no más!”, no queda de otra… acepta las cosas como son, no las niegues, no las refutes, no hagas como que no son así, porque es peor.
Una vez que has apechugado la realidad verás como todo fluye (http://kikin-rispa.blogspot.pe/2016/02/que-fluya-tu-confia.html), aprenderás que no hay motivos para molestarse, te darás cuenta que lo que puedes cambiar es cómo tú reaccionas y actúas frente a lo que pasó.
Yo apechugo mi pelada, mis dientes de cuy, mi cintura de huevo, mi talla promedio (de estatura jaaa), mi cangrejo y mi discapacidad… ¿y saben qué? ¡Soy feliz con todo ello! Porque es parte de mi historia, de mi vida, de mi realidad… así como ser churro, inteligente (superior), divertido, confiable, coqueto, luchador, sensible, perceptivo, hábil, capaz, figuretti, deportista, motivador, etc., etc. jajaja (Sí vanidoso también jajaja). Es todo el paquete, con lo que me gusta y con lo que no, pero con todo, ¡APECHUGO! Y con todo eso fluyo, vivo tranquilo y soy feliz.
¿Y tú? ¿Qué esperas? ¿Por qué te complicas? ¡APECHUGA!
¡He dicho!
En resumen.- “Ama a tu prójimo COMO A TI MISMO”; no podemos refutar la sabiduría del maestro de maestros… ¡Apechugate!
Kikín Rispa
kikerispa2003@yahoo.es
(25 de Julio del 2017)
Y a pesar que soy recontra picón, si me dicen cosas así, no me pico, por la simple razón de que es cierto… soy pelado. ¿Y qué? Es verdad, no se puede hacer nada al respecto, la mera neta carnal, la true… ¿entonces por qué tendría que picarme o peor aún molestarme si lo que dicen es verdad?
¿Acaso cuando me dicen que mido 1.70m me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que no tengo cintura me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo dientes de cuy me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo cáncer me molesto? No, porque es verdad.
¿Acaso cuando me dicen que tengo una pierna me molesto? No, porque es verdad.
La verdad es única, es como es, es inmutable; por tanto la verdad no duele… lo que duele es cuando nosotros no queremos aceptar la verdad como es, muchas veces por razones absurdas. Yo no puedo cambiar los hechos hasta la fecha porque el pasado es historia y ya fue… lo que puedo hacer es aceptarlas como pasaron… en palabras de la sabia popular Tilsa… “¡Apechuga no más!”, no queda de otra… acepta las cosas como son, no las niegues, no las refutes, no hagas como que no son así, porque es peor.
Una vez que has apechugado la realidad verás como todo fluye (http://kikin-rispa.blogspot.pe/2016/02/que-fluya-tu-confia.html), aprenderás que no hay motivos para molestarse, te darás cuenta que lo que puedes cambiar es cómo tú reaccionas y actúas frente a lo que pasó.
Yo apechugo mi pelada, mis dientes de cuy, mi cintura de huevo, mi talla promedio (de estatura jaaa), mi cangrejo y mi discapacidad… ¿y saben qué? ¡Soy feliz con todo ello! Porque es parte de mi historia, de mi vida, de mi realidad… así como ser churro, inteligente (superior), divertido, confiable, coqueto, luchador, sensible, perceptivo, hábil, capaz, figuretti, deportista, motivador, etc., etc. jajaja (Sí vanidoso también jajaja). Es todo el paquete, con lo que me gusta y con lo que no, pero con todo, ¡APECHUGO! Y con todo eso fluyo, vivo tranquilo y soy feliz.
¿Y tú? ¿Qué esperas? ¿Por qué te complicas? ¡APECHUGA!
¡He dicho!
En resumen.- “Ama a tu prójimo COMO A TI MISMO”; no podemos refutar la sabiduría del maestro de maestros… ¡Apechugate!
Kikín Rispa
kikerispa2003@yahoo.es
(25 de Julio del 2017)
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