jueves, 17 de abril de 2014

El Kikin De Pascua

“Te veo bien juerguero Kikin”… es lo que he escuchado bastante seguido las últimas semanas. ¿Obvio no? Ya pasó mi cumple y tenía que celebrar mi fiesta patronal como se merecía. Además que a mí me gusta vivir intensamente, disfrutando cada instante a plenitud, sea bueno o malo, porque en la vida tienes de todo y con todo debes sentirlo a través de tus venas, dejando que fluyan los sentimientos. 

Como por ejemplo el martes por la madrugada que hubo el eclipse lunar seguido de la luna roja. A mí me gusta mucho estar en contacto con la naturaleza y los fenómenos naturales de todo tipo, no dejo de maravillarme de la grandeza de toda la creación y realmente lo disfruto. Por eso, a pesar del frío de la noche, salí al patio trasero de mi casa, con mi mantita, y me dispuse a ver el show. Vi el eclipse de 1 a 2am, lamentablemente a esa hora todo se nubló, justo cuando empezaba la luna roja. ¿Qué hice yo? Me quedé hasta las 3am, congelado (y ahora un poco resfriado), con la esperanza de que se despeje… no fue así, pero por lo menos lo intenté.

¿No se trata de eso? ¿De estar ahí para INTENTARLO? ¿A pesar que a veces no nos salgan bien las cosas o especial (y equivocadamente) como nosotros queremos? Así que si había luna roja, tenía que intentar verla… así como me gusta celebrar mi cumple, y lo hago cual fiesta patronal… Y ahora, en estas fechas de Pascua hago lo mismo y trato de vivirla lo mejor que puedo.

Vivir es un milagro, pero muchas veces se nos pasa sin cuidado agobiados por el famoso “día a día”. No tenemos la costumbre de levantar la cabeza y reflexionar sobre el qué, cómo, por qué, dónde, cuándo, quién (es) de lo que pasa en nuestras vidas. Yo sí lo hago, regularmente, y en Pascua me gusta pensar en cómo estoy llevando mi relación con Dios a través de mis “hermanos”, y que tan seguido lo crucifico con mis miedos, complejos, egoísmos, vanidades y demás PECADOS, con los cuales les hago daño.

A veces por todo lo que hago de mi vida, por mi propósito, por mi lucha contra los abusos hacia las personas con discapacidad, por mi labor social a través de mi asociación y en general porque levanto mi voz de protesta cuando vea abusos e injusticias en nuestra tan convulsionada sociedad; me han dicho cosas como “angelito de Dios”, “vales un mundo”, etc., y realmente es más que una exageración. Soy tan humano y pecador como cualquiera de ustedes y no me merezco tantos halagos. 

Yo pienso mucho en esto y mi conclusión es que estamos tan acostumbrados a NO hacer lo que debemos, que cuando alguien lo hace, para esas personas es algo excepcional y fuera de lo común. De verdad… piénsenlo… ¿Qué hago? Lo que hago es vivir, vivir intensamente, y luchar por lo que creo justo para mí y para los demás. ¿Realmente eso es algo extraordinario? ¿No se supone que TODOS deberíamos intentar día a día hacer lo correcto, buscando el bienestar de nuestros seres queridos y en general, de nuestros hermanos? 

No se… debe ser realmente que estoy loco, o que vengo de otro planeta o que me han alterado genéticamente para ver las cosas de esta manera… Yo creo firmemente que TODOS deberíamos actuar así y más raro aún, creo que todos PODEMOS hacerlo… solo que no nos da la regalada gana de hacerlo porque somos prisioneros de nuestros propios pecados.

Soy pecador, lo soy… Siento egoísmo, tengo pocos vicios, algunos miedos, definitivamente varias vanidades y uno que otro complejo. Soy pecador, como todos… Pero eso no me hace malo… me hace HUMANO. Nadie puede alardear de perfección, porque lo único perfecto es el amor, y amor puro solo Dios (Sea cual sea tu religión). 

Pero dentro de mi condición de humano pecador, también tengo virtudes, y las he ido descubriendo, trabajando, mejorando, fortaleciendo… porque esas virtudes son las que me ayudan a levantar mi cabeza ante el pecado y tratar de ser mejor a cada paso que doy, aprendiendo de los errores, equivocándome una y otra vez, pero jamás, jamás de los jamases, rindiéndome… porque ese es el peor y más grande pecado de todos… dejar  de intentar… dejar de luchar. 


¡He dicho!


Hagas lo que hagas.- acuérdate que hay un feriado, y que ese feriado es porque hubo un sacrificio, y que ese sacrificio fue porque hubo un pecado, y ese pecado dejó de manchar a la humanidad porque hubo un Dios hecho hombre que se sacrificó por ti. Merece que por lo menos le des las gracias y te persignes en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo…

Para los que me acompañan en oración.- pueden ver la agenda del arzobispado y participar de la semana santa en las iglesias del centro de Lima: http://www.arzobispadodelima.org/index.php?option=com_content&view=article&id=896&Itemid=316


Kikin Rispa
kikerispa2003@yahoo.es
(17 de Abril del 2014)

2 comentarios:

  1. La vida es hermosa, y seguir viviendo es maravilloso , gracias a Dios por siempre estar con nosotros. :)

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  2. Genial.... Estos días son puramente destinados a la reflexión y a ÉL. Que todo lo pudo y siempre podrá.
    Un beso!

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