Tan solo un día más

Hoy no voy a ser el Kikin “todo lo puedo”, ni voy a ser el Kikin “inspirador”, tampoco seré hoy el Kikin “tu nos das ánimos a nosotros”. Hoy, como pocos días, seré una persona como cualquier otra que también sufre, que también se pone triste, que también ve las cosas difíciles, que también necesita un descanso, que también llora… porque hasta el más  macho de los machos… llora. 


Todos tenemos nuestros momentos de “bajoneada” y no soy la excepción. Total, mi sangre aunque plebeya, también tiñe de rojo… soy tan humano como todos, con momentos buenos y momentos malos, solo que prefiero ver la vida como una oportunidad de ser felices y trato de no dejarme ganar por los momentos que te quitan esa oportunidad… pero si hasta el barza ha tenido derrotas, por qué yo no? Por qué no tengo derecho a estar triste? Por qué no puedo llorar como una magdalena? Claro que sí! Y eso hago de vez en cuando, no solo porque es NORMAL y SANO, sino porque mis emociones son intensas, y se viven, y se disfrutan, inclusive las tristezas (http://kikin-rispa.blogspot.com/2010/06/no-llores-chavo.html). Todos tenemos el deber y el derecho de ponernos tan tristes como felices, está en nuestra naturaleza, así que no lo reprimo, lo dejo ser… pero al final del día, con ojos reventados, me acuesto recordando que mañana… mañana es otro día.


Pero bueno… o mejor dicho, no tan bueno, este día es uno de ellos, uno de aquellos que quieres que pase volando, uno de aquellos que prefieres refundir en la memoria y que se vayan enterrando poco a poco con otros recuerdos, de preferencia positivos. Qué pasó? Estoy bien? Me peleé con alguien? Estoy en mis “días difíciles”? El frío de Lima me ha puesto triste? Todo y nada a la vez… y aunque parezca un comentario muy femenino, la verdad es que si tiene un motivo (como todo) pero prefiero guardar las reservas del caso… no fue nada mal intencionado, solo que, inevitablemente, algunas situaciones particulares me llevan a pensar en cosas que son “más allá de lo evidente”, a traen a mi corazón tristeza y frustración por pensar que lleguen esas situaciones y que me vea entre la espada y la pared. 


Qué harías si tu mejor amigo (a), tu enamorado (a), tu novio (a), tu esposo (a), tu papá (mamá), hermano (a), cualquier persona cercana a ti, de un momento a otro se desmaya? Si no tienes carro ni sabes el numero de emergencias? Probablemente como todos entres en pánico, ves qué puedes hacer, a dónde ir, a quién llamar… tu ser querido aún no reacciona… sigues pensando, no encuentras respuesta en miles de cosas que pasan por tu cabeza, y por último dices “no importa, al hombro, te llevo cargado (a) para llevarte en taxi al médico”. Situaciones extremas que si bien no pasan a diario, pueden ocurrir, y es bueno siempre tener los recursos necesarios para afrontarlos… y los que ya se pusieron en mi zapato se darán cuenta de lo que estoy sintiendo: Dese el caso que me ocurra, podría cargar a alguien con un pie y en muletas? Inclusive teniendo la prótesis, Podría? Uy mientras me la pongo y toda la macana… que pasaría? 


Bueno, como dije, situación extrema a la que todos estamos expuestos pero las probabilidades son pocas… claro, tan pocas como haber tenido un cáncer en la pierna y me la hayan cortado… cierto? Sin ir tan lejos, solo piensen en algo más real y que pasó hace poco, y que sin duda será una constante por vivir en Lima: los temblores… y peor aún, terremotos… Imaginarán la impotencia de pensar que en vez de yo salir a ayudar a mi familia para evacuar la casa, tienen que ser ellos los que corran a ayudarme… se pueden tomar precauciones, sí, pero no se puede evitar que ocurre ni sabremos qué es lo que pase en ese momento… ahora lo único que siento es tristeza y cólera a la vez de tener la “suerte” de haber pasado por lo que pasé y tener que afrontar esta nueva vida… vida limitante, restringida, vapuleada, poco comprendida y casi nada solidarizada… y es que encima de lo que tengo que sobrellevar por mí y por mi familia y amigos, tengo que soportar a cada hijo de puta en la calle que me hace sentir como un estorbo y no como un ser humano (http://kikin-rispa.blogspot.com/2012/02/el-que-no-corre-muere.html). 


No quiero que piensen que soy un hipócrita y que todo lo que he escrito antes son palabras huecas, los que me conocen saben que no, pero los que no me conocen espero que no juzguen sino que comprendan, no que entiendan porque tendrían que cortarse una pierna y haber tenido cáncer para entenderme. Lo que pido es comprensión; así como el 95% del tiempo soy feliz, lleno de fuerza, de ánimos, de lucha, de amor… tengo mi 5% de tristeza, de frustración, de cólera, de renegar a la vida y repetir, así no quiera: “Por qué yo?”. Y no quiero repetir esa pregunta en mi cabeza porque sé que jamás tendrá respuesta, las cosas pasan por algo, amén! Pero no siempre sentimos que sea justo, más cuando te pasas la vida sin joder a nadie, al contrario, tratando de aportar en la vida de los demás con un poco de amor, fe, alegría… vida.


Justo o no, merecido o no, cierto es que he tenido muchas bendiciones desde entonces y me alegro que así haya sido, y que dentro de toda la mierda que he pasado y de la que he salido adelante a paso firme (y así será siempre), mucha gente tome mi experiencia de vida como un ejemplo de fortaleza y ánimo ante los tragos amargos que se nos presentan en este camino… Pero no quiero tampoco que tengan la idea de que un “héroe” (como alguna vez me lo dijeron y creo que fue un poco exagerado) no pasa malos ratos, que no sufre, que no siente tristeza en el corazón. Es bueno saber y comprender que todo héroe tiene sentimientos, que se ilusiona y se desilusiona, que ama y odia, que ríe y llora… Un héroe no es carente de emociones negativas, las tiene todas como todo ser humano “normal”… lo que marca la diferencia es que las emociones positivas las amplifica y las negativas las “domestica”; no se trata de ignorar, esconder, tapar, engañar, distraer… se trata de darle su lugar, reconocerlas, admitirlas, sentirlas, vivirlas (moderadamente), y luego respetarlas, dejándolas ser por un momento, y luego CONTINUAR. 


Ahí radica el heroísmo, ahí radica la valentía, ahí radica el coraje; cosas que todos poseemos pero que a veces no nos damos cuenta, sea porque nos han hecho creer que no tenemos la capacidad o sea porque nos enseñaron mal (Como cuando nos dicen: Los hombres no lloran!); pero están ahí, en todos, así que todos podemos ser los héroes de nuestra propia historia, todos y cada uno de nosotros, solo falta aprender a no engañarnos, cambiar el concepto de héroe indestructible como “Los Vengadores” y pasar a un concepto de héroe humano, que día a día vive y lucha por darle a las personas lo mejor de sí, desde lo bueno y lo malo que pueda sentir en su corazón. 


Hoy día me tomo una pausa, hoy día mi permito sentirme mal, hoy día suelto un aliento para dejar ir al viento mis miedos y tristezas… Hoy es uno de esos días… Pero pasado este día amargo, permítanme seguir siendo el héroe de mi historia y seguir luchando para que mi vida sea lo más normal que se pueda, con sus limitaciones y frustraciones que encuentre en el camino, pero que nunca, NUNCA, dejaré de vivir con el ánimo de siempre y de seguir pensando que “me tomará más tiempo llegar… pero llegaré”. 


He dicho!


Deseo absurdo.- Tan solo quisiera un día, pediría un día a cambio de todo tan solo por tener mi pierna derecha de nuevo para salir corriendo de mi casa, hasta donde me den las fuerzas, tocando la puerta a todos mis amigos y familia, darles un fuerte abrazo, decirles que los quiero, y seguir corriendo hasta que se me acalambren las piernas y caer al suelo rendido, cansado, agotado pero feliz por haber corrido con ambas piernas… tan solo un día más… 




Kikin Rispa
Kikerispa2003@yahoo.es
(16 de Mayo del 2012)