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lunes, 27 de agosto de 2012

2 de 7: Respeto (YO primero!)


No no no no no… no voy a escribir cosas obvias como que debes respetar a tu pareja porque todo ser humano tiene dignidad y por tanto no puedes traspasar esos límites, en especial cuando se trata de alguien con quien compartes un sentimiento y tiene que ser cuidado y valorado. No no no no no… como digo, es demasiado obvio, todos los saben pero la cruda verdad es que muchos no lo cumplen. 

Y como chibolo de 4 años viene la pregunta: “¿Y pol queeeee? Y la respuesta ni muchos viejonazos de 40 terminan de comprender. Para mí, la firme varón, sucede porque no nos respetamos a nosotros mismos (Toma mientras…). Y esto sucede a su vez porque no nos queremos a nosotros mismos (Toma de nuevo…). There you go… ahora, modo ZEN, a meditar…

Seguro que los viejonazos de 40 se preguntan: ¿Quién tiene la culpa de que no me quiera a mi mismo? Mamá? Papá? Mis amigos? Mi esposa? Mis ex? Mis hijos? Mi jefe? Desde ahí ya comenzamos mal, tenemos la maldita mala costumbre de echar la culpa al primero que pase cerca, no nos hacemos responsables de nuestras decisiones ni de nuestros actos. Debería llegar un punto en que toda persona alcanza la madurez emocional suficiente como para aceptar que a pesar de las cosas que pasan, buenas o malas, cada uno tiene el poder de afrontarlo y salir adelante, como yo lo hago día a día frente a mi discapacidad, aprendiendo y batallando para no dejarme abatir por esta cochina sociedad egoísta, discriminadora y maltratadora. Entonces dejemos de echar culpas a diestra y siniestra, las personas pueden influir en nuestras vidas, para bien o para mal, pero no pueden tomar decisiones por nosotros, esa es nuestra chamba. 

Ya escribí esta frase bíblica antes pero lo volverá a repetir hasta que se les quede grabado como fierro caliente en poto de vaca: “Ama a tu prójimo como a ti mismo” (http://kikin-rispa.blogspot.com/2012/05/mil-y-una-noches-mas.html). Primero tienes que quererte, valorarte, respetarte, antes de poder hacer lo mismo hacia otra persona. Una vez que comprendas que así debe ser y lo apliques recién estarás en posición como para compartirte con alguien más. Acéptate como eres pues no hay 2 como tú, ni los gemelos “paletazo”; cultiva ese amor propio que va a generar en ti siempre un deseo de mejora, de bienestar, de ese “algo más” para ti mismo y para los que te rodean. 

Este amor propio va a generar que te respetes a ti mismo primero por sobre todas las cosas. Es más importante de lo que creen porque, para empezar, si te respetas a ti mismo no vas a permitir que nadie, por más cariño que le tengas, te trate como una zapatilla vieja, rota y sucia; no vas a dejar que jueguen contigo, ni que abusen de ti, ni que se aprovechen de ti… menos que te agredan físicamente! Por consiguiente, si aprendes esto y te respetas como eres también vas a entender la importancia de tratar en la misma medida a tu pareja, pues también merece el mismo respeto y afecto (Así como a todos los seres humanos!) 

Pero somos bestias, queremos corregir y cambiar a medio mundo y lo último que hacemos es evaluarnos a nosotros mismos. Esos que se esmeran tanto por cambiar a su pareja son los que más necesitan ser cambiados. Viven en una mentira y necesitan que todo encaje con su mundo ficticio para sentir que “todo va a estar bieeen”. Justamente cuando no nos respetamos a nosotros mismos es cuando aceptamos ser parte de la mentira, cambiamos cosas que no deberíamos por complacer a la otra persona (Como alejarte de tus amigos…)  y satisfacer sus miedos e inseguridades (http://kikin-rispa.blogspot.com/2012/08/celos-hasta-del-peinecito-que-ti-te.html), creemos que así somos felices y hacemos a la otra persona feliz; pero tarde o temprano toda esa farsa nos cansa, desgasta, se pierde el cariño a la otra persona y a uno mismo y te deja con menos cosas que con las que empezaste la relación. Pero si nos respetáramos no pasaríamos por estos dilemas, a la primera señal de que nos piden cosas sin sentido (repito, como alejarte de tus amigos) pondríamos el parche en una y dejaríamos claros los límites de quién soy yo, quien eres tú, y quienes somos como pareja, juntos.

Cabe añadir que hay gente feliz viviendo en la mentira, como dicen, uno suele encontrar “la horma de su zapato”, y bueno pues, por último, “cada loco con su tema”. Pero eso sí, si aceptan ser parte de la mentira y se sienten feliz en ella, bien por ustedes, pero NO SE QUEJEN! No me vengan después a decir “Pucha Kikin, tenías razón, debí hacerte caso”. (Como ya aprendieron varias personas… si o no “White”?)

Conclusión: El respeto hacia la pareja parte en realidad por el respeto y amor que sentimos por nosotros mismos. Si no somos capaces de respetar al eje de toda nuestra vida (o sea, cada uno de nosotros), no vamos a saber cómo respetar a la persona que tenemos al lado. Respétate, cuídate, ámate, y sin duda sabrás hacer lo mismo hacia tu pareja.

He dicho!

Maaasss adelaaannnttteeeeee.- siguiente post… CONFIANZA.


Kikin Rispa
(27 de Agosto del 2012)

domingo, 19 de agosto de 2012

1 de 7: Amistad (con su intro más)


Hace tiempo no tenía entre “líneas” un tema tan amplio, variado y “polémico” como es el amar a alguien. Curiosamente, para muchos debería ser un tema para pensar en pajaritos y flores y arco iris bla bla bla (macho que se respeta NO es cursi! jeje), pero yendo a la “vida real”, puede ser un tema tan difícil y lleno de exabruptos como una sesión del plena de nuestro benemérito congreso. 

Es así que en la publicación anterior (http://kikin-rispa.blogspot.com/2012/08/celos-hasta-del-peinecito-que-ti-te.html), toqué un tema delicado como es el de los celos en las relaciones de pareja, sin atreverme a entrar a casos clínicos como sabemos que existen para no herir susceptibilidades (más…), pero que a más de uno hizo reflexionar. 

Dentro de dicha publicación escribí algo que se me quedó dando vueltas cual perro detrás de su cola y me parece más que adecuado darle un espacio nuevo para explayarme al respecto. Y yo que dije? Y como era? Dije así: “…tenemos nuestra salidas con amig@s cada uno por su lado y es más, algunos son nuestr@s ex (de los dos), y eso aunque le parezca raro a muchos, no nos estresa ni preocupa, porque sabemos la importancia de tener en nuestra relación amistad, respeto, confianza, tolerancia, diálogo, atracción y amor.”

“Aguanta, Kikin… vas a hablar de tus ex??? DANGER!” DANGER! DANGER!” No no no, tranquilas no más, un caballero no habla (o escribe) de esas cosas, así que respiren que sobre eso NO voy a escribir… “Ya pe’ Kikin, cuéntate algo, el chisme siempre tiene la razón…”. Como diría mi causita “La pipi”: “muérete de viej@, no de sap@” jajaja. Así es que NO, de las exxxxxxxx no voy a escribir, sino de esas 7 palabras que vienen a continuación porque creo que es justo y necesario para que comprendan que sentido le doy a cada una y por qué las considero tan importantes dentro de una relación. 

Para empezar, ¿por qué 7? La respuesta es simple: Porque me da la gana jajaja. Uno tiene q buscar un número referencial no? Y si estamos hablando de relaciones, como para que suene decente, 5 sin muy pocos y 10 ya son muchos como para recordar… con las justos se acuerdan de los 10 mandamientos no? (A ver, repasen…). Se suele decir que el 7 es el número “perfecto” así que me quise colgar de ese cliché, ‘ta bien o no? 

La siguiente pregunta sería, ¿por qué esos 7? La respuesta es la misma: Porque me da la gana jajaja. Esto no es un blog de auto ayuda, ni un blog científico, ni un blog que relata la “palabra divina”. Este es mi blog, ERGO, son mis experiencias y lo que yo creo que debe ser según mi modesta sabiduría de sicólogo de la vida jeje. Así que son producto de mis vivencias durante estos modestos 31 añitos.

Por ahí alguien podría preguntar ¿para qué esos 7? La respuesta ahora sí es distinta: Para que no la cagues!!! Si la persona con la que estás te importa y quieres que tu relación funcione dentro de los “parámetros normales” (Entre comillas porque la normalidad es relativa), es decir, siendo una relación constructiva y no destructiva, entonces es básico que cuentes con algunos valores que sean base y guía para lo que quieres alcanzar. No te gustan mis 7? Ah mi que chu chu chucurucuchu… no te tienen que gustar, no tienes que copiártelos tampoco, lo importante es que te des cuenta de su importancia y que busques o creen juntos sus 7, 8, 9 o las que quieran, pero es necesario que lo sepan, lo tengan presente y sobre todo que lo apliquen.

Entonces vamos a la pregunta que da pie a que empiece mi relato (Lo anterior solo era una breve introducción jajaja) pero no se asusten que, como decía Jack el destripador, “vamos por partes” jajaja. Publicaré una por una en entradas distintas para que no se saturen y lo pueden revisar con calma… despacito despacito… ña ña ña… así que ahí va el primero:

Amistad
¿Saben que es lo chévere de los amigos? Que te aceptan como eres, perdonan tus errores, se alegran de tus triunfos, te gritan cuando la cagas, te abrazan cuando necesitas consuelo, toman contigo cuando quieres ahogar las penas, te acompaña a comprar cuando nadie más quiere, está presente en todos tus tonos, conoce a tus amigos y amigas de otros grupos, entre tantas miles de cosas más. Chévere no? Paja no? Bravazo no? Es necesario que explique a que voy con esto?

Una buena relación de pareja necesita contar con una buena relación de amigos sino mira de todo lo que te podrías estar perdiendo. Imagino las miles de preguntas volando por sus cabezotas: Entonces primeros somos patas y después enamorados? Qué pasa con el “amor a primera vista? Si somos primero enamorados ya no vamos a poder ser amigos? Si estoy con mi mejor amig@ y no resulta, no me arriesgo a perderlo para siempre? No es mejor empezar una relación desde cero? 

Ni el Dalai Lama ni nadie te puede dar todas esas respuestas, recuerden que cada historia es distinta. Puede ser antes o después, también vale durante, lo importante es que la amistad este presente, justamente porque su mayor virtud es que no pretende cambiarte, te acepta con virtudes y defectos, quiere lo mejor para ti en todo momento y haría hasta lo imposible porque así fuera, inclusive si tiene que sacrificarse a sí mismo por ti. 

Conclusión: La amistad no es egoísta en absoluto, es abierta y desinteresada, y entrega la mejor por el bien de la otra persona; saca lo mejor de ti para que la otra persona saque lo mejor de sí.  No es razón suficiente para preocuparse de cultivar una verdadera amistad dentro de una relación de pareja?

He dicho!

También viene.- siguiente post… RESPETO.



Kikin Rispa
(19 de Agosto del 2012)